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Publicada declaración del portavoz del MINREX de la RPDC
  El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de la República Popular Democrática de Corea publicó el día 24 una declaración intitulada "Nos enfrentaremos rotundamente a cualquier forma de amenaza nuclear que imponga EE.UU.".
 Su texto completo sigue:
 Al reconocer oficialmente hace poco la enmienda de la "guía de operación de armas nucleares" en marzo pasado por la administración norteamericana, el vocero del Consejo de Seguridad Nacional de EE.UU. expuso la posición de que esto no apunta a un Estado específico.
  Empero, expresó la supuesta "preocupación" por el desarrollo en alto nivel de las fuerzas armadas nucleares en los Estados soberanos como la RPDC, Rusia y China.
  Esto no pasa de ser una pueril manipulación de la opinión pública para justificar su peligrosa estrategia de uso de armas nucleares, encaminada a refrenar en el terreno militar a otros países y mantener la hegemonía geopolítica, y para esquivar las críticas de la sociedad internacional.
  El MINREX de la RPDC expresa seria preocupación y condena categóricamente tal conducta de EE.UU. que está obsesionado por tomar la supremacía nuclear unilateral inventando de continuo la "amenaza nuclear" proveniente de alguien, en contrasentido a la aspiración de la sociedad internacional a la paz, estabilidad y relajamiento de tensión en el mundo.
  Son realmente graves las influencias negativas que ejerce el reajuste de la disposición nuclear de EE.UU., poseedor del arsenal nuclear más grande del mundo, sobre el equilibrio nuclear y ambiente de seguridad globales y el régimen de desarme nuclear.
  También en junio pasado, una autoridad del Consejo de Seguridad Nacional había dejado en claro quién es el blanco de la susodicha guía diciendo que ésta resalta la necesidad de disuadir a la vez a los Estados soberanos e independientes como la RPDC.
  De hecho, la actual administración norteamericana, que había presentado como su promesa electoral la engañosa "política de no usar primero el arma nuclear", la rehusó en el "reporte de revisión del estado nuclear", publicado después de su llegada al poder, e invierte cada año sumas astronómicas en la modernización de fuerzas armadas de ese tipo.
  En particular, desarrolló como bloque militar basado en el arma nuclear la estructura de alianza con la República de Corea, Japón y otros países satélites de Asia-Pacífico y opera hasta un grupo fabricado con el objetivo de usar el mismo artefacto contra un Estado soberano, al contrario de los universales principios del derecho internacional como la Carta de la ONU.
  Todas las circunstancias comprueban que EE.UU., gustoso de hablar de la inexistente "amenaza nuclear" de otros, es el actor más irresponsable y Estado bribón que causa la carrera armamentista nuclear y aumenta la posibilidad de choque armado en el ámbito global.
  Si ese país no hubiera fabricado ni usado el arma nuclear, tampoco habría surgido siquiera en este planeta el concepto de "amenaza nuclear".
  Al igual que en el siglo 20, la amenaza nuclear a la sociedad internacional proviene de EE.UU. también en la centuria 21 y no cambiarán en lo adelante su foco y dirección.
  Los esfuerzos de los Estados soberanos por aumentar el potencial de defensa nacional frente a la creciente amenaza nuclear de EE.UU. no pueden ser en ningún caso un pretexto de aumento de fuerzas nucleares con carácter agresivo ni de reajuste de la disposición nuclear del tipo provocador.
  Aunque EE.UU. hable tanto con exageración de la "amenaza nuclear" de otros países, la RPDC impulsará según su cronograma la construcción de fuerzas armadas nucleares que sean suficientes y fidedignas para defender firmemente la soberanía, seguridad e intereses del Estado, lo cual significa el ejercicio del derecho a la autodefensa, el más indispensable y legítimo para preservar la paz y seguridad de la región.
  En lo adelante también, la RPDC consolidará por todos los medios la fuerza estratégica para controlar y eliminar los desafíos a la seguridad de todo tipo, que pueden emanar del peligroso reajuste de la disposición nuclear por EE.UU., y se enfrentará rotundamente a cualquier forma de amenaza nuclear.