A costa de toda la vida
El año pasado, la RPDC introdujo la técnica de tratarla por método eléctrico en el cultivo de arroz, logrando una tonelada de incremento de cereales por hectárea como promedio, en el área de su aplicación.
Quien desempeñó el papel medular en el desarrollo de este método es el doctor Kwon Chang Tok, jefe de sala de la Facultad de Ingeniería Minera de la Universidad Tecnológica Kim Chaek.
Un día de hace 10 años, él estaba en una mina para investigar la técnica de flotación y oyó decir a los obreros que se elevaba la tasa de rendimiento de los minerales enriquecidos, cuando se trataban con el agua de otra localidad.
Entonces, pensó que ahí había algo que aclarar, empezó a estudiar a fondo las obras técnicas vinculadas con el agua y llegó a concebir la idea de aplicar el agua activada en el proceso de flotación mineral.
Elaboró e introdujo el aparato activador eléctrico del agua.
Esta invención contribuyó a disminuir de modo considerable el consumo del reactivo y elevar la ley de los minerales concentrados y la tasa del rendimiento en la flotación.
Luego, en el proceso de ampliar el ámbito de su aplicación a otras esferas, tuvo la seguridad de que su uso en el riego haría superar las influencias del anormal meteoro catastrófico e incrementar el rendimiento por hectárea con pocas manos de obra y costos.
A la sazón, su edad estaba cerca de los 60 años de edad, por lo que hubo quienes le aconsejaban que su fracaso podía dañar todos sus méritos acumulados hasta ahora.
Pero, con el único anhelo de resolver sin falta lo que se considera útil para la solución de los víveres, aunque fuese poco, no lo abandonó, ni se quedó desanimado, sino que condujo al éxito el colectivo de investigación.
Se desarrollaron distintos tipos de aparatos de tratamiento del agua, quedaron mejorados sus peculiaridades y rendimiento y se amplió gradualmente la dimensión de su aplicación.
Él obtuvo muchos logros de alto valor científico.
Pero, lo más valioso es el auténtico espíritu de investigación y la limpia conciencia con los que lleva a buen cabo por propia voluntad lo que hace falta al país y al pueblo.
"Puesto que pronto cumpliré 60 años de edad, me cuesta trabajo acudir a granjas de todo el país para introducir la técnica en ellas.
Sin embargo, pienso que nosotros, los científicos, debemos estar dispuestos a cumplir de modo incondicional lo que hace falta con apremio al país y al pueblo y dedicar sin titubeo toda nuestra vida a la investigación, aunque no llegue al éxito.
El honor de un científico brilla no por el grado o título académico, sino cuando nos sacrificamos en bien del país y el pueblo."
El doctor Kwon Chang Tok fue exaltado como mejor científico y técnico del Estado para 2023.